Los vinos son una bebida que ha estado presente en nuestras vidas desde tiempos inmemoriales, y a lo largo del tiempo, se han ido perfeccionando las técnicas de elaboración y los sabores que se pueden obtener. Dentro de la amplia variedad de vinos que se pueden encontrar en el mercado, los vinos blancos son una opción muy popular, y dentro de ellos, hay diferentes estilos y sabores. En este artículo hablaremos sobre cómo saber si un vino blanco es afrutado, para poder escoger la mejor opción según tus gustos.
¿Qué es un vino blanco afrutado?
Un vino blanco afrutado es aquel que tiene un sabor más dulce y frutal que otros vinos blancos. Esta característica se logra a partir de la selección de uvas específicas, que tienen un alto contenido de azúcar y una baja acidez. La fermentación de estas uvas se detiene antes de completarse, lo que deja una mayor cantidad de azúcares en el vino.
Aspectos a tener en cuenta
Para identificar si un vino blanco es afrutado, hay varios aspectos que podemos analizar:
1. Aroma
El aroma de un vino blanco afrutado es dulce y afrutado, con notas de frutas como la mandarina, limón, melocotón o manzana. Si al abrir la botella percibes un aroma fresco y frutal, es probable que sea un vino blanco afrutado.
2. Sabor
El sabor de un vino blanco afrutado es dulce, con un sabor intenso a frutas. Normalmente, también presenta una acidez baja, lo que lo hace más fácil de beber y provoca una sensación agradable en el paladar. Deja una sensación fresca y ligera en el final.
3. Color
El color de un vino blanco afrutado suele ser más claro y brillante que otros vinos blancos. Es común que tenga tonos amarillos claros o verdes, lo que indica una maduración temprana de las uvas y una menor oxidación.
4. Crianza
La crianza de un vino blanco afrutado es usualmente corta, lo que permite que las características afrutadas y frescas se mantengan en su máximo esplendor. Normalmente este tipo de vinos se toman jóvenes, aunque hay excepciones en las que se permite su envejecimiento en barricas de madera.
5. Maridaje
Un vino blanco afrutado es ideal para acompañar platillos con sabores suaves y delicados, como ensaladas frescas, pescado blanco, pollo a la parrilla y carnes blancas. También es excelente para tomar como aperitivo o servido con postres a base de frutas.
Epílogo
En resumen, para saber si un vino blanco es afrutado es fundamental prestar atención a su aroma, sabor, color, crianza y maridaje. Si lo que buscas es una bebida dulce y fresca para acompañar tus platillos favoritos, un vino blanco afrutado es una excelente opción.